Parece que vivimos con los miedos equivocados. Que somos temerosos y nos cuidamos no necesariamente de lo que realmente conlleva más peligro.
Esta y otras ideas nos invita a pensar el libro que les presentamos el día de hoy. Se trata de “De qué (no) te vas a morir”, un texto que, a partir de estudios y estadísticas, nos demuestra que los miedos más difundidos por los medios masivos nos llevan a malinterpretar la realidad, desatendiendo en ocasiones aspectos más importantes y que, ante todo, requieren un mayor cuidado.
Dicho esto, es importante señalar que la valoración de este libro puede ir por dos caminos: por un lado, disfrutando de su contenido: los datos, historias y anécdotas que nos llevan a sorprendernos de la forma en que percibimos la realidad; y otro: reflexionando sobre las razones por las cuáles pueden haber sido redirigidos nuestros miedos y la manipulación a la que podemos ser sometidos cuando lo que es real y concreto, es tergiversado a partir de impresiones poco precisas y -en algunos casos-, mal intencionadas.
A modo de ejemplo dejo algunos de los datos estadísticos que el propio libro destaca en su contratapa:
“Los manís matan más que los terroristas. Los perros matan más seres humanos que todas las arañas y tiburones juntos. Los mosquitos han matado a más gente que todas las demás causas de muerte en la historia de la humanidad. Es casi 2000 veces más probable que mueras ahogado en el mar que por el ataque de un tiburón. El alcohol mata diez veces más que la suma de todas las víctimas por accidentes de tráfico, homicidios y suicidios. No tener amigos representa un peligro comparable a fumar 15 cigarrillos al día. Vivir junto a una central nuclear produce menor dosis radioactiva que comer un plátano.”
¿Te sorprendieron algunos? Pues te invitamos a descubrir otros mucho más extraños y a reflexionar sobre nuestra mala percepción de los peligros, lo necesario y -ojalá-, lo verdaderamente importante en nuestra vida.
H.R. – Departamento de Lengua y Literatura
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